
Como siempre el peregrino
con la luna en su ritual,
se refrena en su camino
y comienza a derramar,
con las letras va trazando
un anhelo inmortal.
Trotamundos sin destino
sin saber por cual razón,
con su lápiz siempre a tino
y un papel color pasión,
vierte lo que su alma calla
pero siente el corazón.
Un poeta de las sombras
en sus noches ermitañas,
sin seguir ninguna norma
va tejiendo telarañas
con la rima en su sentir,
loco designio divino
en el sueño de escribir. Leonardo67.
No hay comentarios:
Publicar un comentario