
Que hermoso recuerdo
cuando allá por febrero
tu mirada y la mía
por vez primera se vieron.
Que extraño cóctel
de tristeza y belleza
me diste a beber,
y cual bello tesoro
lo quise esconder
como el más preciado regalo
de una misteriosa mujer.
Y comenzó tu mirada
a volar por el cielo
de mis sueños sin alas,
a golpear las ventanas
de mi corazón.
a encender el fuego de mi pasión
y todo el hielo del alma
se fue derritiendo,
muy pronto el deshielo
mi ser inundo.
Tu mirada en la mía
por siempre esa noche
en mi ser se quedó. Leonardo67.
No hay comentarios:
Publicar un comentario