Extrañarte.

Cuando te dejo en tu puerta,
vuelvo a mi casa de prisa
para comenzar el ritual.
Porque extrañarte me gusta,
porque me hace imaginar
que tú sigues a mi lado
cuando en realidad no estás.
Porque yo al extrañarte
voy recordando los besos
que nos supimos brindar.
Porque mientras te extraño
voy recordando caricias,
sin invadirme la prisa
para dejarlo de hacer.
Porque sigo imaginando
que me estoy reflejando
en tu mirada sin par.
Porque te puedo amar
aun cuando no estás a mi lado
y mi corazón alado
nunca deja de volar.
Extrañarte me fascina,
extrañarte es un ritual. Leonardo67.